El arte que degenera y degenera, desde su función de espejo del intelecto para obrar su propia purificación, hasta llegar a ser una mercancía sin más para la especulación de los superricos. Los superricos pagando cifras astronómicas por la simple muerte, la cadavera decorada de diamantes, la pobre muerte a precio de oro.

Y la estrella negra de cinco puntas al revés...

El ser humano que se cierra su puerta espiritual hacia los estados superiores, hacia el oro espiritual. Ese es el oro del que hablaban los antiguos, el único oro de valor, el oro profúndamente simbólico.

Y la estrella dorada de cinco puntas erigida hacia lo alto por los pitagóricos...



(Comentario sobre "la burbuja del arte contemporáneo"; https://www.youtube.com/watch?v=JZCXp_s8FeY)